Nuestro socio, Marcos Villa Kenning, integrante de la Expedición AAM, al Incahusi, nos hace una reseña de su vivencia de esa experiencia
Tenía pensado narrar una pequeña bitácora de la expedición…pero cambié de parecer…sencillamente porque al final las etapas y los hechos generalmente son los mismos o parecidos a cualquier ascensión a ésta montaña.
Como lo charlamos con el equipo en uno de los campamentos, no recuerdo si fue en el Campo 2, con su largo y aprovechable día para aclimatar a los 5700-, no nos gusta la idea de narrar una ascensión haciendo notar lo “durísimo” y “extremo” del montañismo, por el contrario, creemos que subir a la montaña es una actividad que nos alegra inmensamente y permite disfrutar la vida al máximo, por unos inolvidables días.
Como en casi todos los aspectos de la vida, para sentir y vivir lo que significa ascender un +6500, habrá que elegir entre ser espectador o actor…o lo que es lo mismo elegir entre subir montañas o hablar de ellas.
En la AAM estamos en el grupo que subimos montañas, sin duda es EL lugar de Tucumán para hacerlo, y esto es lo destacable de nuestra expedición…que lo hayamos logrado socios sin mucha experiencia en alta montaña.
El éxito de ésta aventura no hubiera sido posible sin la base que significa la AAM, por lo tanto, es claro que el mérito primigenio se lo debemos a la gente que fundó nuestro club en primer lugar, y en segundo a la actual comisión directiva y socios que colaboran activamente en su funcionamiento…Chapó por Uds!
Por último, dejaré unas palabras de agradecimiento a nuestro Guía Álvaro Carrasco…te pasaste! Hay que tener las ideas muy claras para leer la montaña y decidir con criterio cómo subir por una ruta que no teníamos el track, me atrevo a decir que Álvaro se recibió de guía autodidacta con ésta expedición, sencillamente porque los hechos lo demuestran…sin duda no hay muchos socios en la AAM que puedan guiar a ésta altura, y esto también es un logro de la AAM.
Pasó la segunda expedición AAM al Inca, la primera que traemos la cumbre para nuestro club…a seguir soñando con más expediciones y nos vemos ahí!
Marcos Villa Kenning