Sandra, Oscar, Juan Manuel, Miguel y Mario, el 10 de agosto de 2019, salieron rumbo al Negrito

Casi Negrito Express

El día viernes a la noche, ya estaba acostada y 23,30 suena mensaje por whtasapp, era Oscar proponiéndome ir al Negrito al otro día, iban Miguel, Mario y él. Le expliqué que íbamos en un solo auto a Mala Mala, con Juan Manuel, …dale llamalo… y la repuesta no se hizo esperar, vamos! A qué hora? 7,45 en El Infiernillo.

    Modificaciones en mi mochila… más abrigo, otra térmica, campera de plumas, bastones y llevaba botas y zapatillas para ver cuál era la idea del grupo, si subíamos rápido con zapatillas, botas, si era para entrenar.

    Largamos la marcha desde el Infiernillo a las 8,45, con -7 grados. El sol escondido todavía detrás de la montaña.  Y empezamos a ponernos de acuerdo con el grupo, sabíamos que habíamos salido retarde y si decidíamos intentar cumbre porque las condiciones físicas y de clima así lo permitieran existía la posibilidad de llegar a los autos ya de noche. Hicimos recuento de linternas y había 3.

    Mi propia tirada de orejas: nunca pero nunca sacar cosas de la mochila que siempre deben estar ahí: Linterna, (aunque haya corte de luz en tu casa)… Encendedor (aunque no tengas con que prender la cocina) y Botiquín. Yo me dejé la linterna.

    Y en la marcha los ritmos se van diferenciando, lo conversamos, y acordamos que íbamos a esperar a Mario y a Miguel en las piedras grandes. Todos conocíamos bien el lugar.  Las vegas estaban congeladas, masas enormes de hielo, hermoso paisaje con el sol que las hacia brillar, sacamos fotos.

    Llegamos a las piedras, y empezamos a analizar los tiempos, cuánto nos quedaba hasta la cumbre, y en cuanto tiempo estimábamos la bajada. Habíamos tardado casi 4 horas hasta allí, eran las 12,30. Miguel apareció y nos dijo que se volvía con Mario, porque estaba un poco descompuesto.  Reanudamos la marcha a las 13 más o menos, pero ya habiendo tomado la decisión de caminar hasta las 14,30, a esa hora estemos donde estemos emprendíamos la retirada. 

    Y así los hicimos… a las 14 hs. tuvimos una última parada, comimos, adecuamos el abrigo y a bajar a las 14,30 como habíamos quedado. Estábamos muy bien para seguir, podriríamos haber hecho cumbre, pero para qué arriesgarnos.

 En la montaña hay que respetar los tiempos planificados… puede haber muchos imprevistos…un cambio abrupto de vientos, perderse, aunque sea unos minutos, una torcida de pie, etc etc, cualquier cosa que, aunque no sea grave que te haga perder tiempo… entonces hay que respetar lo planificado, y más aún si otros compañeros te están esperando abajo!!

El Negrito sigue allí, la próxima vez salimos más temprano!!!!

Sandra Herrmann