UN PASO MÁS, UN PASO A LA VEZ
Por Gladys Escudero y Hernán Yapura, en modo alpino
03:00 del 6 de junio, nos encontramos en San José inició de la Expedición hacia el DOS LAGUNAS y EL CANDADO, nos trasladamos desde aquí en camioneta, hacia el Puesto del Ingenio
05:15 ya estábamos caminando con nuestro equipo y mucho entusiasmo. Dejamos el vehículo en el Puesto.
Ofrendamos a la PACHAMAMA pidiendo permiso, protección y un buen tiempo, agradeciendo al Sol, y al Cóndor. Charlas y risas y los guanacos, fueron nuestra compañía. Armamos campamento a 4 200 msnm el frío se hizo presente Un té calentito para combatirlo y a descansar.
07:30 del 7 de junio ya en marcha y luego de un par de horas, nos encontramos con una canaleta de hielo que teníamos que subir usando grampones. Era la primera vez que los usábamos y había un entusiasmo por explorar cómo era, cómo se sentía y así fue.
Fue fácil en partes, la cascada era segura y podíamos gramponear bien y avanzar seguros, pero no toda era así, había partes de hielo muy duro y el grampón no era fácil clavarlo, los bastones se nos resbalaban y por momentos el sol y el viento hacían aflojar piedras que caían por la canaleta, a las que teníamos que esquivar y estar muy atentos.
Salimos de la canaleta a la 14:57, unos pasos más y estábamos frente a una bellísima laguna toda congelada, paramos un momento a contemplar. La cumbre nos esperaba, continuamos y alguien más nos esperaba, una apacheta, a lo lejos se mostraba. Llegamos y las lágrimas se hicieron presentes.
A las 17:42 CUMBRE, EN EL DOS LAGUNAS 5 423 msnm !!!!!
Emoción, contemplar, fotos y dejar nuestro testimonio. En esta apacheta había un testimonio de Pablo Zelaya del año 2015, y de nadie más. Dejamos el nuestro y ya el tiempo nos exigía bajar.
Empezó el descenso con la ausencia del sol, confiando en que la luna nos acompañaría. La cascada fue nuestro mayor desafío, ya que al iniciar el descenso resbalamos y nos deslizamos como 7 metros sobre el hielo, los pies, los bastones y Dios lograron frenar la caída. Ese fue el momento de completa atención de dar un paso a la vez, confiando. No importaba lo lento, el frío ni el tiempo que nos llevaría solo importaba dar un paso seguro.
El frío nos alentaba a movernos a no pensar cómo, sino a hacerlo, gramponear una vez y otra vez. La luna nos acompañó un buen rato y nos dejó ya en la madrugada. A las 03:58 ya estábamos en el campamento con una infinita alegría y agradecimiento.
EL CANDADO 5 522 msnm
Levantamos campamento a la 12:30 del 8 de junio y nos pusimos en marcha hacia el que sería nuestro campamento base para ir a El Candado. Ascendimos hasta 4 350 msnm y faldeamos en dirección del campamento. Un hermoso recorrido cruzamos unos acarreos bellísimos con sendas de guanaco unas vegas, la luna nuevamente se hacía presente, el atardecer. 20:13 llegamos al campamento un bello lugar, vestigio de los antiguos y agua cerca. Una rica polenta con queso calentita y a descansar.
Un hermoso día nos aguardaba 06:30 del 9 de junio, ya estábamos con la compañía de las estrellas y el infaltable frío rumbo hacia la cumbre. Un imponente acarreo se nos presentaba. Nuevamente un paso a la vez y así hasta el fin, el acarreo había quedado atrás y el cálido sol nos recibía una bella laguna congelada donde Hernán practicó patinar, cruzando por el medio ja ja. Continuamos anonadados por tanta belleza.
A las 13:13 CUMBRE EN EL CANDADO 5 522 mnsm !!!!!
Un cálido recibimiento, emocionante, alucinante contemplar la perfección, la INMENSIDAD de la Madre Naturaleza a la ofrendamos, agradeciendo el momento y todo lo vivido. Compartimos unos chocolates y sumamos nuestros testimonios. Para Hernán, era la segunda vez en la cumbre
Había varios testimonios. hicimos dedicatoria de cumbre a nuestros seres queridos que siempre nos están apoyando GRACIAS.!!
El descenso comenzó a las 15:10 muy contentos y por supuesto poniendo atención en cada paso, el reencuentro con el acarreo. Nos separamos para que las piedras no nos pegaran por si se desprendían. Casi al finalizar encontré la POPOSA (o pupusa, que se usa como un té, para el mal de altura) mi Madre y Padre familiares que ya no pueden llegar hasta ahí, siempre me encargan, y yo feliz de poder llevarles un poquito de amor, magia y medicina.
El paisaje del regreso nos regalaba al atardecer, colores que no puedes hallar en una acuarela.
A las 19:12, ya nos encontrábamos en el campamento, celebrando con un café y un alfajor triple, risas y charlas con Hernán, a quien agradezco de lo más profundo de mi ser. Gracias a su conocimiento y planificación, hizo la expedición fuera más accesible.
Gracias a mi padre ALFREDO ESCUDERO
Gracias a mi madre ALSIRA TARIFA
Gracias a MIS HERMANAS
Gracias a la AAM, que siempre está presente, apoyándome en estos desafíos
Gracias a DIOS Y A LA PACHAMAMA
Y a todas las personas que me prestaron y regalaron equipo para la montaña, lo que me hace que sea más cálido y accesible
GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS
Gladys Escudero
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